La colección Paidós Estética siempre guarda sorpresas entrañables. Cartas sobre Cézanne (1992) es el título número tres de las poco más de dos decenas de títulos bien escogidos, que nos acercan a la reflexión sobre el arte escrita por grandes autores, entre ellos, Rainer Maria Rilke.
Este libro deja ver que la exposición conmemorativa al primer año de la muerte de Cézanne, visitada por R. M. Rilke, puso que puso a Rodin en un segundo lugar de las preferencias del poeta. Cuando en 1907 se encontró con la exposición del fallecido padre de la pintura moderna, Rilke se dedicó a la diaria escritura de cartas a su mujer donde exponía sus impresiones e intuiciones sobre la viva obra expuesta en el Salon D`Automne de París.
Las cartas que, a decir de K. Kippenberg, exceden los límites de la Historia del Arte, son una recuperación literaria y una descripción del modo en que la pintura convive con las profundidades de la experiencia humana, como lo señalan estas líneas del 24 de junio de 1907:
Este libro deja ver que la exposición conmemorativa al primer año de la muerte de Cézanne, visitada por R. M. Rilke, puso que puso a Rodin en un segundo lugar de las preferencias del poeta. Cuando en 1907 se encontró con la exposición del fallecido padre de la pintura moderna, Rilke se dedicó a la diaria escritura de cartas a su mujer donde exponía sus impresiones e intuiciones sobre la viva obra expuesta en el Salon D`Automne de París.
Las cartas que, a decir de K. Kippenberg, exceden los límites de la Historia del Arte, son una recuperación literaria y una descripción del modo en que la pintura convive con las profundidades de la experiencia humana, como lo señalan estas líneas del 24 de junio de 1907:
Sí, la obra artística siempre es el resultado de un haber estado en peligro, de haber llegado hasta el final en una expericiencia, hasta donde ya nadie puede ir más lejos.
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